Se acerca el invierno y con él varios cambios, el más importante el cambio de hora. En la madrugada del sábado al domingo 30 de octubre los relojes se atrasaron una hora por lo que las tarifas con discriminación horaria sufren modificaciones en los dos periodos.

Todos los clientes residenciales que tengan la tarifa DH hasta ahora disfrutaban del periodo valle (el más barato) en el horario 23h a 13h, en cambio desde el pasado domingo este mismo periodo pasa a ser de 22h a 12h. Lógicamente el periodo punta pasa de 13h a 23h a ser de 12h a 22h.

Con la tarifa de discriminación horaria se puede llegar a reducir más de un 20% la factura de la luz si se concentra el consumo en el periodo valle. Esta tarifa es muy provechosa si el hábito de consumo diario puede dirigirse a las horas baratas y por lo tanto reducir al máximo el uso de la energía en el periodo punta, es decir el diurno.

El cambio de hora obedece a una directiva de la Unión Europea y tiene como objetivo aprovechar mejor las horas de luz solar y por lo tanto reducir el consumo de electricidad. Para establecer el momento de los cambios de hora se tuvo en consideración el hecho de que en España existen dos horas oficiales, una para la Península y Baleares y otra para Canarias, que va una hora por detrás desde 1922.

Según estimaciones del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, el potencial ahorro en iluminación en toda España por el cambio de hora puede llegar a significar un 5% del consumo eléctrico en iluminación, equivalente a unos 300 millones de euros.

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